Leer es un placer voluntario. Lee lo que quieras y dónde quieras. Se trata de leer por placer. No se trata de leer las obras completas de Séneca igual que escuchar buena música no quiere decir que haya que escuchar las grandes óperas y zarzuelas de la historia.
En esto contribuye mucho la Feria del libro antiguo. Se puede encontrar de todo y, lo que es mejor, a muy buen precio. Desde colecciones descatalogadas, a tebeos, puedes encontrar ese libro que buscabas y no encontrabas. Y de todos los tipos, ensayos, novelas, poesía, teatro, libros infantiles, cuentos.
Fotos: Juanjo / Salamanca Blog
Es algo que no debe perderse. Es una aportación social impagable, por eso creo que deberían dar a esos libreros que arriesgan su negocio, no lo olvidemos, todas las facilidades del mundo para que año tras año esto vaya a más y no se vaya al traste como ha pasado con otras muchas cosas similares.
Y la Plaza Mayor es un buen escenario si así lo consideran. Si lo es para cualquier acto cultural ¿qué mayor acto cultural que una feria dedicada a la lectura? Y con todas sus actividades culturales paralelas, como esas obras de teatro, esas exposiciones de fotografía. Es un placer ir cualquier tarde y ver a mucha gente merodear por las casetas, comprando libros y preguntando por otros tantos. Y sobre todo ver a un niño tan contento con su nuevo libro. Hay que fomentar mucho más la lectura y no dudemos que con iniciativas como esta es como se hace.
Libros, esos vicios confesables, esas drogas sugeridas.
