Esta mañana en el trabajo me encontré en el correo con un pequeño debate producido después de que uno de mis compañeros, llamémosle JJ, se le ocurriera enviar el recorte de prensa anterior sobre la familia real:
Ab – ¿Los presidentes de la República no «descansan»? ¿O es que son «trabajadores infatigables» todos? De todas las dinastías que han reinado en España, desde pequeño nunca mereció mi consideración la de los Borbones (excepto algún caso aislado). Pero de las dos Repúblicas que ha habido, no soporté a la primera y aborrezco hasta el tuétano a la segunda. Y cuando quieras te lo argumento.
JJ – La información del periodico es objetiva. Tu has interpretado lo que tu has querido. Yo sólo lo he dejado caer. Creo que en el artículo no hace ni una sola referencia a la República.
Ab – Las comillas son muy descriptivas.
N – Fíjate si son descriptivas que yo pensé que estaba echao la siesta y se levantó para ir a ver a su nueva nieta…
etc, etc, etc…
Un típico debate por correo en donde suele haber varios tipos de participantes, como los que tienen posiciones encontradas y que no están dispuestos a dejarse convencer, los que no dicen nada, y otros que nos ofrecen aportaciones muy interesantes:
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JA – No entiendo estos debates. Pienso que los reyes son algo muy importante de lo que no se puede prescindir, sin ellos sería imposible cantar las cuarenta.
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Pero siempre hay alguien que opina de otra manera, por que cada uno tiene intereses diferentes….
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Ag – Eso depende JA, para otros los reyes no importan, sería preferible tener «tres cerdos»
