Catedral, Foto de DarcoTT.com

La Edad Media constituyó durante mucho tiempo una sociedad rural y guerrera muy equilibrada. Los Señores Feudales cuidaban de sus súbditos y entre todos mantenían el feudo. No obstante, el desarrollo de las ciudades entre muros empezaba a ser asfixiante. Las aguas residuales contaminaban las potables y las pestes provocaban demasiadas muertes. El crecimiento de las ciudades necesitaba nuevos planteamientos. El comercio desarrollaba una nueva clase social, la burguesía. El movimiento de personas provocaba el intercambio de ideas. Nacían las Universidades. La Religión necesitaba nuevas órdenes como el Císter, los Franciscanos o los Dominicos para no depender de Señores Terrenales. El Arte, fiel reflejo de la vida humana, transformaba el austero Románico en otro llamado Gótico, iniciado en Francia con la construcción de la Iglesia de Sant Denis. Se necesitaban Iglesias más altas, con anchos contrafuertes exteriores del que nacían nervaduras que iban a unirse en un solo punto muy alto. La luz entraba por arcos ojivales y rosetones. Se empezaban a recuperar las ideas de Platón: Dios está en lo más alto y es la luz. Todos pueden caber en un solo edificio.

Ahora, cuando la Sociedad Industrial ha entrado en gran crisis, volvemos a necesitar nuevos planteamientos. La mayoría que vive a ras de suelo tiene problemas concretos que no entienden los que viven en las alturas. Faltan esas nervaduras góticas que unan las bases con los puntos más altos. El mundo globalizado necesita comunicación, luz y energía y para ello nada mejor que inspirarse en los artistas de las Iglesias Góticas. Entrad e inspiraros.

 


Texto | Chibus

Foto | Darco TT