€ Vs $, por Maria Moreno

La implantación de una moneda única en un espacio y tiempo concreto produce ventajas e inconvenientes. Siempre ha sido objeto de debate intenso entre los economistas, por ejemplo, Maynard Keynes llevó la oferta de una moneda única a Bretton Woods en 1944 pero EEUU prefirió imponer su propia moneda -el Dólar-.

El valor de cambio de las monedas ya era un tema tratado por la Escuela de Salamanca en el siglo XVI. Una onza de oro valía más en Alemania que en España a pesar de tener el mismo emperador-Carlos I de España y V de Alemania-. Las relaciones comerciales internacionales dependen en gran medida de dicha magnitud. Si este valor no es correcto puede llegar a provocar guerras mundiales.

Bretton Woods fue la conferencia monetaria y financiera en la que las Naciones Unidades pretendieron organizar la economía del planeta pero en la primera gran crisis económica después de la Segunda Guerra Mundial, el Presidente de los EEUU en 1971- Sr. Nixon-, tuvo que eliminar la paridad dólar/oro para que no quebrara el sistema financiero de esa Nación y de la llamada zona Occidental.

Y nacieron los “parches Basilea”, cada crisis económica -siempre alineada con crisis energética- se produce una crisis financiera: Basilea I, Basilea II y ahora Basilea III. EEUU dividió Occidente en zonas económicas: En Asia, Japón con su yen -y pensar que recibieron sus “bombazos atómicos”-. En Europa-Alemania con su Euro -y pensar que fue arrasada por las tropas estadounidenses-. Y en América del Norte, Centro y Sur, EEUU con su dólar. Inglaterra escarmentó y no permitió que se tocara su Libra.

En Europa, Alemania lideró la implantación de una moneda única con las premisas de eliminar los riesgos de tipo de cambio y los costes de conversión además de impedir las llamadas “devaluaciones competitivas”. Pero nunca se tuvo en cuenta la inflación provocada en las naciones “periféricas”. ¿Recuerdan el cambio mental de cien pesetas por un euro?, eso significó una inflación entre el 50 y el 60%. Mientras, el BCE –creado para no permitir la inflación en la Unión Monetaria y que obedece al dictado de los teutones-, mantenía tipos de interés inferiores al 5% provocando burbujas como la inmobiliaria en España o Irlanda. No se supo armonizar inflación con tipos de interés.

Tampoco se habló de los diferentes tipos de interés de la deuda soberana. La llamada prima de riesgo es el nuevo arancel para hacer trampas con el valor de la moneda. No se habló de una unión bancaria para que todos los países tuvieran el mismo coste financiero o que cada empresa fuera financiada según sus balances fuera del país que fuera. Las empresas alemanas se financian más baratas que las españolas aunque sus balances sean peores o las Cajas de Ahorros alemanas no han sido inspeccionadas y las españolas sí eliminándolas del mapa. ¿Más trampas?

El Euro nació en 2002 valiendo un 0,90 de dólar, subió a 1,59 en 2008 con la caída de Lehman Brothers y ahora llega hasta 1,39 en plena crisis europea. Este valor solo beneficia a Alemania que si hubiera conservado el Marco, su tipo de cambio sería muy superior y no podría realizar las exportaciones de las que tanto presumen. Para ser competitivos en el exterior nos exigen bajar los salarios un 35% pero ello provoca a su vez la caída del consumo interno y la ruina de las familias y las empresas. Si el tipo de interés de las “deudas soberanas” no es igual para todos, mejor salir “pitando”.

 


Texto | Chibus
Foto | «€ Vs $» de María Moreno publicada bajo Licencia CC BY 2.0