Universidad de Salamanca
La Universidad de Salamanca se prepara para elegir Rector. El día 21 de Noviembre es el día elegido. De momento `parece que solo se presenta el actual mandatario.

El próximo periodo “rectoral” se presenta como el ser o no ser de la Universidad de Salamanca. Por un lado sabemos que si depende de la Junta de Castilla y León su futuro real estará en “entredicho”. Todos somos conscientes que una Autonomía pobre como la nuestra no se puede permitir el lujo de tener cuatro universidades públicas ni otras cuatro privadas. El mercado de la enseñanza superior no da para tanto y ni Valladolid, ni Burgos ni León van a dejarse absorber por la más antigua y la de más prestigio. La Universidad Pontificia que va ganando alumnos año tras año tendrá que luchar contra la Miguel de Cervantes de Valladolid (muy premiada por los empresarios de la Región) o contra la “virtual” de Burgos o la Católica de Ávila o la Seck de Segovia. Lo dicho, esto no da para tanto. ¿Deberíamos votar todos los salmantinos?

¿Qué plan estratégico debería ejecutar Salamanca para no perder en lo único que estamos en cabeza dentro de nuestra Región?

Lo primero, dejar de pertenecer directamente a la Comunidad Autónoma y pasar a ser la única Universidad dependiente del Gobierno de España.

Lo segundo: Internacionalizarse. Por ejemplo Oxford “solo” tiene 22.000 alumnos pero la mayoría son “extranjeros” y su calidad está contrastada.

Lo tercero: Incrementar los centros de Investigación. Los alumnos escogerán unas universidades en función de los mismos. Su financiación actual es un desastre.

Y ahora que se aproxima el VIII Centenario es el momento de dar otro espectacular salto que nos permita sobrevivir otros cien años y para ello nada mejor que hacer la Universidad Internacional de Salamanca.

Por ejemplo, se haría un nuevo campus en los actuales terrenos de la Fábrica Mirat y Polígono del Rio Tormes. Este nuevo campus estaría enfocado a la parte de “letras” que está quedando relegada y también tiene su gran futuro si cuenta con otro gran centro de investigación sobre las filologías y las religiones.

Ahora que en Pekín se ha celebrado una gran feria sobre la enseñanza de los idiomas nos podemos dar cuenta que China o Brasil necesitan preparar un inmenso número de ciudadanos que hablen varias lenguas además de las suyas. Salamanca podría ser el sitio mágico donde un chino o una brasileña pudieran aprender a la vez español, inglés y francés y de esta forma dar trabajo a nuestros excelentes filólogos que ahora deambulan por el mundo enseñando solo español. En el mismo campus habría un espacio especialmente preparado para las religiones. Se imaginan que en un mismo espacio físico pudieran rezar, dialogar, discutir y entenderse religiosos y estudiosos de las religiones del mundo que desearan compartir un espacio “común”

Sinceramente, la nueva Universidad Internacional de Salamanca es posible y deseable. Su financiación depende de la unión de todos los salmantinos. Ser o no Ser

 


Texto | Chibus
Foto | Darco TT