RTVE

T.V.E. se financia a través de los presupuestos generales del Estado. Antes lo hacía con ingresos publicitarios pero el déficit era un “pozo sin fondo”. Sus periodistas se afirman que son líderes en todo, y lo hacen sin sonrojarse. Los telediarios son “encefalogramas planos”: tres noticias generales, un poco para un partido político, otro poco para el otro, migajas para el resto. Si hablamos de territorios, todo ocurre en Madrid y algún suceso luctuoso en el resto. Si hablamos de deporte, el Real Madrid, el Barça, el Ronaldo o Mesi de turno y su publicidad estática. Esta publicidad cuesta a los españoles más de mil millones de euros al año y se la embolsan sociedades domiciliadas en paraísos fiscales. Es hora de pedir explicaciones. Es indignante que cada día saquen como noticia el entrenamiento de dos equipos de fútbol y su rueda de prensa y no saquen otras noticias. Es indignante la escasa información sobre el deporte femenino aunque ganen títulos importantes. Es indignante la escasa información cultural que ofrecen de “provincias”. España necesita una verdadera televisión pública, abierta y plural, de lo contrario, mejor privatizarla para reducir el enorme déficit del Estado que amenaza la educación, la sanidad o a los dependientes.

 


Texto | Chibus