Universidad de Salamanca

Oficialmente, la celebración del VIII Centenario de la Universidad de Salamanca comenzó con un Real Decreto en 2008. El 28 de Noviembre celebramos ya su octavo año. Dicha celebración ha sido considerada como “acontecimiento de excepcional interés público” y “tema de Estado”, otorgando por ello la Presidencia de Honor a SSMM los Reyes de España.

Ya se han creado todos los mecanismos legales con tres comisiones: Interinstitucional, ejecutiva y técnica. Ya se han aprobado los beneficios fiscales y ya se han aprobado los mecanismos para participar mediante el mecenazgo o el voluntariado.

Es decir, todo el “tinglado” oficial está montado. El 2018 será un año excepcional para la Universidad de Salamanca y para Salamanca pero debemos hacernos la siguiente pregunta: ¿Estamos cargando combustible para que esto dure otros 800 años?. Hemos recibido una gran herencia, nuestra obligación es incrementarla, no dilapidarla.

Investigadores han demostrado que la economía de la Ciudad-una vez aniquilada Caja Duero- depende en un 50% de la Universidad, pero en los últimos cinco años esta está siendo sometida a un “corralito”-según afirman los rectores-, siendo “jibarizada” de forma planificada bajo el pretexto de la crisis económica general mientras proliferan un día sí y otro también Universidades privadas que ganan con premeditación concursos públicos-ver caso de la Escuela de la Policía Nacional-.

Y ahora la pregunta del “millón”: ¿Somos conscientes los salmantinos de lo que nos estamos jugando? Por encuestas a pie de calle parece que “pasamos olímpicamente” pero nos encanta seguir diciendo que la Renault no vino a Salamanca porque un Obispo no la quiso, cuestión que nunca se demostró, quizás por no ser cierta.
El resumen al día de hoy es que no hay implicación suficiente. Los ciudadanos y las instituciones vivimos de espaldas e incluso dentro de la Universidad ocurre lo mismo.

El mecenazgo y el voluntariado están muy por debajo de lo esperado. Los anchos muros y los fornidos cancerberos a ambos lados del puente elevadizo impiden entrar y salir en lo que hasta ahora ha sido un castillo herméticamente cerrado.

Llegado este momento hay que darle un nuevo impulso y allá va la idea del Primer Grupo Cívico de Apoyo al VIII Centenario, copiando de lo que se hizo por la Capitalidad Cultural Europea, que antes del evento pasó por momentos similares:

Crear un grupo “ejecutivo” de trabajo con tres personas: Una de la Universidad-por ejemplo, Sr. Cabero-, otra del Ayuntamiento –por ejemplo Sr. Rodríguez- y otra de la Pontifica –por ejemplo, Sr. Losada- y dedicarse en cuerpo y alma a implicar a la Ciudad de Salamanca, a los ciudadanos, las empresas y las fundaciones privadas.

Y uno de los grandes mecanismos para ganar nuestro futuro sería constituir un “Sistema Financiero Local” con dinero público y privado para retener y atraer talento joven financiando la I+D+i+i´+i¨¨, de esta forma también lucharíamos contra la despoblación y el envejecimiento general: ¿Cátedra iSalamanca?

La lección nos la dieron los palentinos cuando iban a amortizar sus “galleteras” y salieron a defenderla los de la derecha, la izquierda, el centro, las asociaciones empresariales, sindicales y de vecinos. Juntos no solamente consiguieron que no se cerraran sus fábricas, ahora, cada año, se hace una nueva creando riqueza para todos.

 


Texto y propuestas Chibus | Foto Miguel Darco TT